¿Aprovechar el espacio al acondicionar una buhardilla, sinónimo de espacio perdido? ¡Excelente idea! ¿Convertirlo en un vestidor? ¡Muy ingenioso! Descubre nuestros consejos para organizar las buhardillas.
Para un adulto, se recomienda una columna de almacenamiento de aproximadamente 60 centímetros de ancho y 60 centímetros de fondo. Considera 1 m de altura para camisas y chaquetas, 1,20 m para pantalones y 1,60 m para vestidos y abrigos. Naturalmente, las dimensiones son menores en el caso de niños, pero ¡no olvides que van a crecer!
La opción más interesante para ganar espacio es instalar el vestidor bajo las vigas intermedias de la estructura, en las zonas donde no se puede estar de pie. Si la estancia es demasiado alargada, opta mejor por el lado del hastial. También puedes combinar ambas opciones.
Si está destinado a una pareja, es imprescindible prever dos espacios de almacenamiento separados, ya que las necesidades no son las mismas para cada uno: barra alta para vestidos, más baja para chaquetas y camisas…
Si es para la habitación de los niños, ¡debe ser sencillo y resistente! Y si son varios, cada uno debe tener su propio espacio bien definido.
Haz bien tus cuentas: ropa interior, joyas, accesorios, pijamas… calzoncillos, calcetines, corbatas, relojes, gemelos… Los cajones permiten optimizar el almacenamiento de los objetos pequeños. Y si tu vestidor no tiene puertas ni cortina, los cajones le aportan inmediatamente un aspecto más ordenado.
Si solo dispones de un pequeño espacio bajo la pendiente, puedes, por ejemplo, plantearte hacer un vestidor para zapatos, chaquetas y trajes, o ropa deportiva. O incluso un vestidor para prendas de otra temporada, que permite liberar los armarios de toda la familia.
En su gran mayoría, los vestidores son cerrados, lo que permite ocultar el contenido de los armarios. Esto resulta imprescindible cuando la estancia también sirve para recibir invitados, como en un estudio, una habitación infantil, una oficina o una sala de juegos…
Ten en cuenta también que las puertas pueden convertirse en elementos decorativos, eligiéndolas en diferentes colores o diferenciándolas por sus tiradores (vintage, numerados, con una inicial…)
No obstante, puede que no dispongas de suficiente espacio para puertas, lo que dificultaría el paso. En ese caso, puedes optar por la solución abierta, especialmente si se trata de una habitación de adultos, que por lo general está alejada de las miradas. Sin embargo, también puedes instalar una simple cortina, que te permitirá cerrar sin ocupar espacio y aportar un toque decorativo interesante.
